Va de becarias

Creo que ya es hora de explicar el porque del título de este blog. En efecto, soy becaria, lo soy desde hace casi casi un añito. Algunos pensareis que es un trabajo fácil, otros, que debo de tener las rodilleras muy gastadas. Pues bien, os explicaré algunas cosas sobre este trabajo.

Ser becaria no es fácil. No, no lo es. Vale que el trabajo no sea muy difícil. Vale que pueda cambiar mi horario de trabajo a mi antojo. Pero el trabajo tiene su lado oscuro...

Empezando por que tu trabajo es mantener la pagina web de la escuela, encargarte de que todo funcione correctamente, y un día descubres que te has convertido en la chica para todo (incluso para contar crucecitas en un papel). De repente te utilizan para cantar nombres, para hacer carteles, para traducir del inglés al catalán, para descifrar porque una carrera de 180 créditos obligatorios tiene en realidad 181,5 , para manipular cifras y estadísticas... vamos, que hay días en que más que la becaria me siento un poco como Bea en sus tiempos de secretaria corrupta!

De repente, dejas de ser la becaria web para ser… la becaria de dirección. En efecto, toda dirección se pasea por tu despacho que, por cierto, es la sala de impresoras. Y como todo el mundo imprime cosas, de repente hay más gente paseando por ahí que por las ramblas, y te sientes un poco invisible porque la mayoría de veces ni te saludan. Eso sí, si las impresoras fallan (debo decir que esas impresoras tienen una probabilidad de fallo del 99%) no dudan en exponerme sus quejas. Que comparta despacho con ellas no significa que las entienda señores!

En fin, poco a poco piden más de ti. Llega un día en que en tu mesa aparece un post-it que pone: "Mensual Castell, Nicaragua. Preparar noticia."
Y ahí te temes lo peor... Acudes a tu gran amigo google con todo lo que sabes, el post-it, la escuela, algo aparecerá. Total, te has convertido en la reportera de la revista, digo, de la web. De repente y sin carrera de periodismo, tienes que apañártelas para conservar tu puesto de trabajo. Debes buscar, encontrar, resumir, traducir, ampliar y informar.

Todo esto por el módico precio de doscientos lerus al mes. No esta mal el pack, eh?

Pero lo peor está por llegar. Ser becaria tiene un plus de peligrosidad. Todos sabemos que los techos de mi uni no son precisamente de fiar... Es un tema que no me preocupaba mucho, supongo que porque nunca lo he vivido de cerca. Pero el techo de mi despacho tiene personalidad. Al parecer, están haciendo obras no muy lejos de nuestro querido edificio, y los estudiantes ya hemos notado algún principio de seísmo en horas lectivas. Todo el edificio tiembla cuando se escucha la maquina taladradora pero, en especial, el techo de mi despacho. Tú estas tecleando frente a tu tocho-PC (ah, no había comentado que tienes que trabajar con un tocho lento y con poca ram) cuando de repente la pantalla empieza a temblar, y encima de ti escuchas: CLA-CLA-CLA-CLA... Te preguntas si serán las impresoras haciendo de las suyas otra vez, pero finalmente descubres que no, algo falla. Preguntas y, en efecto, los despachos tiemblan y hay más gente que se queja de ruidos en el techo. Luego vienen los ánimos de quien te cuenta que al antiguo becario se le cayó una placa del techo y, por suerte, solo le rozó pero podía haberlo matado. Al parecer no hay nada que hacer, las obras deben continuar y el edificio, el edificio quizás tenga menos futuro que la sagrada familia con el ave, pero una becaria no puede abandonar...

Quien dijo que trabajar fuese fácil?